Concierto de Año Nuevo: Strauss, Mozart, Dvořák y ópera con ballet
Praga, Casa Municipal (Obecní dum) — Smetana Hall
Sobre el espectáculo
En este esperado Concierto de Nochevieja, escuche los melifluos sonidos de la música clásica de Wolfgang Amadeus Mozart, Antonín Dvořák y Johann Strauss en la preciada y mundialmente conocida Casa Municipal de Praga (Obecní dum).
Programa
- Wolfgang Amadeus Mozart – La flauta mágica – Obertura 'La Flauta Mágica', K. 620
- Wolfgang Amadeus Mozart – La flauta mágica – The Magic Flute: Aria of the Queen of the Night
- Wolfgang Amadeus Mozart – Una pequeña serenata nocturna – Serenata n.º 13 para cuerdas en sol mayor
- Wolfgang Amadeus Mozart – Arie of Constance — Abduction from Seraglio
- Antonín Dvořák – Slavonic dance no 10 op 46/10
- Antonín Dvořák – Polonaise – Opera Rusalka
- Antonín Dvořák – Humoresque
- Johann Strauss – Emperor Waltz
- Johann Strauss – Pizzicato — Polka
- Johann Strauss – Mein Herr Marquis
- Johann Strauss – Unter Donner und Blitz, Polka op. 324
- Johann Strauss – La Marcha Radetzky, Opus 228
Casa Municipal (Obecní dum)
La Casa Municipal es uno de los monumentos más preciados del centro histórico de Praga, elegantemente situada en la Plaza de la República, cerca de la Puerta de la Pólvora. Históricamente, el solar albergó el palacio del rey de Bohemia durante la Edad Media antes de convertirse en colegio, residencia arzobispal y, más tarde, academia militar. En 1912, el edificio original dejó paso a la impresionante estructura Art Nouveau que vemos hoy. Desde su inauguración, la Casa Municipal ha acogido fastuosos bailes, conciertos, exposiciones y acontecimientos notables, como la proclamación de la independencia checoslovaca en 1918. En la actualidad, la Casa Municipal acoge principalmente eventos de música clásica en Praga. Su gran salón, que lleva el nombre del estimado compositor checo Bedrich Smetana, es uno de los principales escenarios del Festival Internacional de Música de Primavera de Praga. Con capacidad para 1.200 personas, la sala es famosa por su excepcional acústica. Llama la atención su cúpula de cristal, enmarcada por rejas de acero y vidrieras de colores, que se ilumina al atardecer. Para realzar aún más su esplendor, la sala cuenta con un magnífico órgano, admirado por los mejores organistas del mundo, con casi 5.000 tubos coronados por un retrato de Smetana.
Wolfgang Amadeus Mozart
Posiblemente el compositor más importante de la historia, Wolfgang Amadeus Mozart, genio musical austriaco del siglo XVIII, vino al mundo en 1756 en Salzburgo. Demostrando una notable aptitud musical desde sus primeros años, Mozart empezó a componer a la tierna edad de cinco años. A lo largo de su breve vida creó más de 600 obras, entre sinfonías, conciertos, música sacra y óperas, hasta su prematura muerte a los 35 años. Su profundo impacto en los futuros músicos es innegable; el propio Ludwig van Beethoven afirmó que "la posteridad no volverá a ver un talento semejante en 100 años". A pesar de su gran fama y de los elogios de la crítica en toda Europa, Mozart tuvo problemas de estabilidad económica y fue enterrado en una tumba anodina en el cementerio de San Marx de Viena.
Antonín Dvořák
Antonin Dvorak es uno de los checos más conocidos y célebres del mundo, ya que sus composiciones alcanzaron la aclamación internacional durante su vida. Nacido en 1841 en un modesto pueblo checo, en el seno de una familia de carniceros, Dvorak comenzó a estudiar violín a los seis años, demostrando una aptitud musical inmediata y excepcional. A medida que crecía, también dominó el piano y el órgano mientras trabajaba a tiempo parcial en un matadero. A los 16 años, Dvorak se matriculó en la Escuela de Órgano de Praga, destinada a formar compositores profesionales. Tras su graduación, se unió a la orquesta de Karel Komzak en Praga y comenzó a componer vigorosamente, aunque económicamente tenía dificultades y complementaba sus ingresos con actuaciones musicales en iglesias y clases particulares. El año 1874 marcó un momento crucial, ya que Dvorak obtuvo una dotación económica de un concurso austriaco por quince de sus obras, lo que le permitió abandonar la orquesta para dedicarse por completo a la composición. Durante esta época creó obras fundamentales como las Danzas eslavas, los Dúos moravos y su Concierto para violín, que le catapultaron al éxito. En 1892 aceptó un puesto en el Conservatorio Nacional de Nueva York, donde enseñó hasta 1895, y regresó después para enseñar en el Conservatorio de Praga, del que llegó a ser director. Dvorak siguió siendo un compositor querido y de éxito en todo el mundo hasta su fallecimiento en 1904.
Johann Strauss
Johann Strauss hijo, venerado como el rey del vals, es el maestro austriaco por excelencia de las melodías de baile y las óperas ligeras. Nacido en las afueras de Viena en 1825, sus primeros años de vida transcurrieron bajo la sombra de su padre, Johann Strauss I, un compositor muy apreciado que se opuso rotundamente a las aspiraciones musicales de su hijo, favoreciendo en su lugar una carrera bancaria. Por ello, el joven Strauss tuvo que aprender a tocar el violín en secreto, bajo la tutela de Franz Amon, que era el violinista principal de la banda de su padre. A pesar de estos obstáculos, y de asistir a la escuela politécnica para apaciguar a su padre, en 1844, Strauss hijo estableció desafiantemente su propio conjunto, actuando en varios casinos y restaurantes. Su padre, que ejercía una gran influencia en los círculos musicales de Viena, intentó frenar la carrera de su hijo prohibiendo la entrada de su orquesta en lugares y eventos importantes. Sin embargo, estos obstáculos no impidieron que Strauss hijo cosechara un gran éxito en toda Austria. Tras el fallecimiento de su padre, amalgamó ingeniosamente sus orquestas y amplió sus giras por Austria y las naciones vecinas junto con sus hermanos compositores, disfrutando de una amplia aclamación por sus composiciones de danza frescas y vanguardistas. La fama internacional de Strauss se disparó cuando dirigió un monumental conjunto de 1000 músicos en una actuación que batió récords en Estados Unidos. Siguió siendo una figura musical muy querida hasta su muerte en 1899, creando obras que vibraban con alegría, una celebración de la vida y los sutiles encantos de la naturaleza, desde los relajantes murmullos del agua hasta los suaves susurros del viento y las hojas.
Dirección
Casa Municipal (Obecní dum), 5 Republic Square (Namesti republiky 5), Praga, República Checa — Google Maps